sábado, 28 de agosto de 2010

Saturno

Risas húmedas
arrinconadas en hueso
limpio, débil.
Efervescente la brisa
de licuado espeso.

Momento.
Que.
Sangra.
Rojo.
Incoloro; invisible.

Burbujas
lustradas con luz
desde adentro
se deforman y saltan.
Se escapa
el brillo a su ataúd.


Materia incierta
desarma sus paredes.
El reflejo vuela
ensancha su vientre
afila su cabeza
y viaja.

Rompe espacios
vacíos
que rellenan la distancia de los cuerpos
amorfos
flotantes
entre plasma brillante
y túneles giratorios.

domingo, 8 de agosto de 2010

Réquiem

Arpegio de guitarra suicida
en el oído
de la lúgubre lujuria del sonido.
Inconformes salidas
gotas que duermen en la selva.

Pisando lúcidas cabezas
caminan las garras de esta fauna.
Plumas, colmillos, escamas
y una inocente cárcel que se quiebra.

Horas y horas.
Dagas y ganas
bañan tu sensible cuerpo
mientras rozan con la frente y las rodillas
el musgo oscuro de un arroyo
que recorre los recuerdos
y pone a prueba la osadía.

Brilla la pupila y fija la mira
en la base de una copa
esclava de restos de vino;
rebalsada de finos anhelos de alivio.

De letras armonizadas
consta este secreto
y ese fiel momento
que te atormenta.

De tambores bautizados
por el sudor de los compases
consta este momento
y ese fiel secreto
que te acompaña.

domingo, 1 de agosto de 2010

Seguir

Seguir significa arrastrar
las uñas de los pies
en azufre caliente.
Seguir es arena invencible
que canta en la misas del averno,
en la cornisa
y en la eterna injusticia de la hoguera.

Es el ave de un nido profundo y húmedo
posado en un enorme relámpago.
Seguir es dueño de los bosques
oscuros y claros.


Vuela
plumífero brillante de plumas duras.
Vuela
sigue el eclipse, duerma donde duerma
ya sea en tu vista o en tu recuerdo lúcido.
Vuela
sobre esa arena que nos tapa el brillo de la luna
entre esa tormenta de la cuál somos súbditos.
Vuela
y por siempre dame fuerza en esta guerra.